Algunas universidades importantes han decido darle un marco regulatorio a la actividad de agente inmobiliario
La profesionalización del Agente inmobiliario, ha sido siempre una escuela de origen ecléctico, mezcla de vendedor, astucia y enseñanza de los que están en el negocio que conocen muy bien cómo atender las necesidades de sus clientes.
Las diferentes maestrías que se proponen en universidades de la ciudad Capital, en las carreras de Arquitectura, Escuelas de negocios, son una oportunidad interesante para el ambas carreras, actividad bien recibida desde las inmobiliarias, que cuentan con un instrumento de selección de personal y alternativas de su propio personal, ahora en los medios, que a su vez, tienen relación con la propia actividad.
Mientras, la iniciativa de formación en esta actividad que fue una propuesta que lentamente fue dando resultados interesantes, se destacó en un momento difícil para el sector inmobiliario, según nos comentan desde la inmobiliaria Sebastian Cantero, hay aproximadamente 25 meses de caída continua en el mercado local, información desde la Cámara inmobiliaria, aunque esta inmobiliaria en especial lleva adelante emprendimientos nuevos, edificios que comercializa con el modelo de Fideicomiso, al que la crisis no afectó tanto como a otras empresas, supo moverse con facilidad en el entramado de proposiciones desde el gobierno, pesificación, CEDIN, cheques inmobiliarios.
El hecho de contar con un respaldo profesional en sus conocimientos ha organizado mejor la situación de la consultoría en negocios inmobiliarios, se genera un vínculo institucional del que se obtiene apoyo, estímulo de nuevas ideas, asociaciones interesantes que permiten que se mejore el mercado del sector y permite convenios interesantes con el Real Estate internacional.
Temas como Fondos de inversión nacional e internacionales, administración de inmuebles, inversiones en desarrollos inmobiliarios, son algunos de los importantes puntos fuertes de las propuestas en las maestrías; sobre todo cuando las inmobiliarias, como la que el joven empresario Sebastian Cantero preside lleva a las inversiones internacionales con sus sedes en Uruguay y Miami, como política del plan de expansión de esta empresa.
Las experiencias internacionales de planificación urbana no está alejadas de las propuestas del emprendimiento de Fideicomiso inmobiliario Tango Work and Live, y desde la empresa Cantero, expresan que la comprensión de esa obra va más allá de lo que un inversionista puede tomar como interesante, también es un aporte al crecimiento de la zona, a la valoración de los inmuebles del círculo de influencia y por lo tanto un beneficio para el entorno.
La educación, es importante para tener un respaldo y un lenguaje común entre inmobiliarias, relación de la que se benefician los constructores y arquitectos que acceden a los posgrados como un modo de introducir esta visión, también en sus diseños, así como en materiales de construcción, y estar a la altura de las grandes empresas inmobiliarias del mundo.
Compartiendo experiencias que ya hay en países como Brasil, en Argentina, se abrió un espacio de participación de profesionales y personal que aporta experiencias interesantes en un negocio histórico como son las inmobiliarias.
Argentina pudo exponer su problemática particular sobre el sector inmobiliario y plantear alternativas comunes con académicos de Estados Unidos y países de América latina, encontrándose con problemáticas parecidas, aún con idiosincrasias diferentes.
El entorno académico ofrece un espacio de intercambio de soluciones, conocimientos y propuestas más allá de los resultados; la educación es siempre una fórmula exitosa para todos los componentes.